Como ya dijimos en uno de nuestros primeros artículos, los centros de supercomputación son un elemento clave en el desarrollo científico y tecnológico de cualquier país y por ello su enorme importancia y su efecto decisivo en el avance de estos campos. En los últimos años Estados Unidos ha ido perdiendo su supremacía en este ámbito en favor de los países asiáticos pero sin duda sigue apostando fuerte en este campo. La prueba, el nuevo Blue Waters situado en el "National Center for Supercomputing Applications"

Supercomputador Blue Waters Illinois

Situado en la Universidad de Illinois, en el "National Center for Supercomputing Applications", el Blue Waters ha comenzado su fase final de construcción. Actualmente ya cuenta con un total de 48 armarios Cray XE6, Pero esta primera fase, que comenzará a ser usada de manera restringida, únicamente representa un 15% de la capacidad final del Blue Water. En un mes aproximadamente un selecto grupo de equipos científicos empezarán a usar esta primera fase llamada "Early Science System" a la vez que el resto de módulos se vayan instalando hasta tener el Blue Waters completo en unos cinco años, con una poténcia estimada superior al Petaflop, lo que le haría en estos momentos entrar en el top 10.

Se espera que Blue Waters, como no podía ser de otra forma, sea uno de los supercomputadores más potentes del planeta y sus recursos se dedicarán a investigar como los virus infectan células, a entender la expansión del universo tras el Big Bang, diseñar nuevos materiales o predecir el impacto del cambio climático o de los desastres naturales.

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