Windows 10 incorpora por defecto una nueva característica llamada Wi-Fi Sense que comparte con todos tus contactos de Outlook, Skype y alternativamente de Facebook, las credenciales de tu red Wi-Fi (de manera encriptada) a no ser que cambies el nombre de tu red Wi-Fi.
Wi-Fi Sense llega con el objetivo de simplificar la conexión a las redes Wi-Fi a las que conectemos con nuestros dispositivos de Windows 10 para todos nuestros contactos pero lo que provoca es principalmente un grave problema de seguridad y privacidad además de un incordio innecesario para los dueños de las redes Wi-Fi. Una vez conectemos a cualquier red Wi-Fi aparecerá un pop up preguntándonos si queremos compartir socialmente esta red, en caso que aceptemos, las credenciales encriptadas serán subidas a servidores de Microsoft y compartidas con todos nuestros contactos de Outlook y Skype (opcionalmente lo podemos compartir también con todos los de Facebook). En este sentido no existe ninguna opción para elegir a que contactos se comparte esta información y a cuáles no.
Que supone esto? que a partir de ese momento cualquier persona en esas listas (normalmente contando con un buen porcentaje de pseudo-conocidos o directamente desconocidos) podrá conectar a por ejemplo el Wi-Fi de nuestra casa. Microsoft argumenta en favor de este “avance” que el usuario “invitado” únicamente podrá utilizar la conexión para salir a Internet y nunca para conectar o ver otros dispositivos en la red como impresoras, NAS, carpetas compartidas....Desde el momento en que estas credenciales deben ser de alguna manera desencriptadas en el dispositivo invitado para conectar con el router que esté sirviendo la conexión Wi-Fi y conociendo los continuos problemas de ciber seguridad, esta afirmación por parte de Microsoft nos parece como poco arriesgada. Es bastante probable que se pueda acabar consiguiendo en breve un sistema para a través de una conexión de este tipo poder romper la restricción y tener acceso total a la red con los graves riesgos que esto supone tanto a nivel personal como para redes corporativas.
Que podemos hacer para evitar que se comparta nuestro Wi-Fi?
Microsoft en este caso vuelve a tomar la decisión equivocada y obliga a cambiar el SSID de cualquier Wi-Fi para mantenerla fuera de este sistema, cuando hubiera sido mucho más seguro forzar un cambio de nombre para redes Wi-Fi que aceptaran ser compartidas, pero no.....Por lo que para mantener nuestra red Wi-Fi teóricamente “a salvo” deberemos añadir el texto “_optout” al SSID. Por ejemplo si nuestra red Wi-Fi se llama “CASA”, deberemos cambiar el SSID a “CASA_optout” de esta manera en principio Windows 10 no nos invitará a compartir los datos con nuestros contactos aunque habría que ver si también se evita que se suban estos datos a los servidores de Microsoft...
Por lo que los pasos a seguir para los siguientes:
- Antes de actualizar a Windows 10, cambiar el SSID de nuestro Wi-Fi incluyendo el texto “_optout” como hemos comentado más arriba.
- Tras actualizar a Windows 10, editar la configuración de privacidad en Windows, para deshabilitar todas las opciones de Wi-Fi Sense. Para ellos vamos a Inicio-> Configuración > Red e Internet > Wi-Fi > Administrar Configuración Wi-Fi y allí deshabilitamos todas las opciones.
Mientras que con el segundo paso evitaremos compartir desde nuestro dispositivo nuestras redes, hay que recordar que solo añadiendo el “_optout” evitaremos que otras personas compartan nuestra red. Tiempo al tiempo pero nos tememos que Wi-Fi sense traerá multitud de problema de seguridad y privacidad.
